Unidos en la misión

S

omos un organismo al servicio de la comunicación de la Iglesia y de la pastoral de las comunicaciones sociales en las seis diócesis de Aragón: Barbastro-Monzón, Huesca, Jaca, Tarazona, Teruel y Albarracín y Zaragoza.

Aunque cada diócesis dispone de su propia página web con un perfil más corporativo, existe un portal informativo común que canaliza todo el tráfico noticioso: «Iglesia en Aragón«. Este medio, que mantiene una edición semanal en papel con una tirada cercana a los 40.000 ejemplares, es una publicación multimedia de actualización diaria que busca potenciar la comunicación bidireccional para hablar, escuchar, conectar…

Además de editar este medio de comunicación, OFICIA, como estructura interdiocesana, apoya a las seis diócesis aragonesas en el desarrollo de una comunicación estratégica, ofreciendo los recursos e ideas necesarias para que su imagen –y el de la Iglesia en Aragón– sea reflejo de la realidad.

En su misión y trabajo cotidiano, la oficina está en estrecho contacto y colaboración con la Conferencia Episcopal Española (CEE), en especial con el Secretariado de la Comisión Episcopal de Medios de Comunicación Social y la Oficina de Información.

HUMANIZAR

Uno de los principales objetivos es generar un trato fluido con los medios de comunicación social presentes en la región, para favorecer la promoción de los valores humanos y del Evangelio mediante una presencia fiel de los mensajes de la Iglesia.

FORMAR

Otro objetivo prioritario es ayudar a los seminaristas, sacerdotes, religiosas, religiosos y demás agentes de pastoral en la aplicación de las nuevas tecnologías como herramientas de apoyo en el proceso de la nueva evangelización.

EN COMUNIÓN

OFICIA pretende desarrollar y coordinar la acción pastoral propuesta por los obispos de Aragón en torno a la comunicación mediante el desarrollo de un plan de comunicación integral que responda a las particularidades de cada territorio.

OFICIA, constituida el 17 de octubre de 2017, responde a la carta “Iglesia en misión al servicio de nuestro pueblo de Aragón”, en la que los obispos recogen que “dada la precaria realidad humana, social y eclesial de muchas de las zonas rurales de nuestras diócesis, claramente insuficiente para llevar a cabo hoy la tarea de una nueva evangelización, se necesitan otras estructuras pastorales acordes con las circunstancias actuales, con suficiente capacidad para impulsar la tarea evangelizadora con nuevo ardor, nuevos métodos y nueva expresión”.