Un auto del Tribunal Superior de Justicia de Aragón, fechado el 7 de agosto de 2017, mantiene la medida cautelar del pasado 7 de septiembre de 2016 y declara nulas las Instrucciones de 17 de julio de 2017 del Director General de Planificación y Formación Profesional del Departamento de Educación del Gobierno de Aragón.
El resultado práctico de esta medida es que la clase de Religión continuará impartiéndose en el nivel de Educación Primaria durante noventa minutos semanales, hasta que el Tribunal Supremo resuelva por medio de sentencia firme si una reducción a cuarenta y cinco minutos se ajusta a lo que regulan los Acuerdos entre la Iglesia Católica y el Estado Español, que equiparan la asignatura de Religión al resto de las asignaturas fundamentales.
La asignatura de Religión se encuentra presente en la mayor parte de los sistemas educativos europeos, como un importante cimiento para el desarrollo integral de la personalidad de los alumnos y para su aprendizaje cultural y social. Además la elección de una enseñanza de acuerdo a los principios religiosos y morales de los padres es un derecho humano reconocido constitucionalmente.
Las diócesis aragonesas continuarán con la defensa de las familias que, libremente y en su derecho, eligen la asignatura de Religión y Moral Católica, así como de los profesionales que la imparten.
